A los dos sindicalistas de Comisiones Obreras detenidos el pasado martes hoy hay que sumar dos nuevos arrestos en la localidad de Bétera. Uno de ellos es un concejal de Compromís del Ayuntamiento de Bétera quien en una red social contaba este miércoles, casi en directo, que había sido “detenido, interrogado y después de más de dos horas puesto en libertad” y añadía, “menuda democracia”.Otro de los detenidos es un empleado fijo del Ayuntamiento de Bétera. J.J.B asegura que él acudió a la Guardia Civil voluntariamente antes de que fuese detenido en su puesto de trabajo. Según ha contado a Betera.com, se presentó a las 9.00 en el cuártel de la Pobla de Vallbona, una vez allí se le notificó su detención por un presunto delito de daños contra la propiedad: sellado de puertas, ventanas y cerraduras con silicona. El sindicalista niega estos hechos y según afirma “sólo participó en la pegada de carteles animando a los trabajadores a secundar la huelga general del 29 de marzo como se suele hacer siempre que se convoca una huelga en los centros de trabajo de la zona”. J.J.B asegura que la Guardia Civil le tomó declaración, las huellas dactilares, algunas fotografías e incluso quisieron hacerle una prueba de ADN a la que el se negó.
Desde Compromís lamentan estas detenciones por considerarlas “totalmente desproporcionadas”. El portavoz comarcal de la formación, Paco García, insiste en que es “muy preocupante que se califique a los sindicalistas como miembros de banda organizada, como si fueran componentes de una organización terrorista, cuando lo único que estaban haciendo es pegar carteles anunciando la huelga como hacen siempre las agrupaciones comarcales”.
La portavoz del Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Bétera ha lamentado estas detenciones y ha querido mostrar toda su solidaridad tanto a su compañero en la corporación municipal como al empleado del consistorio. Pilar Ros asegura “que estas detenciones son un atentado contra la democracia y las libertades públicas, ya que CC.OO es una organización reconocida y recogida en nuestra Constitución”.
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Estas cosas no apuntan bien. Si encima son funcionarios y sindicalistas pues aún peor. Esperemos que todo se lleve con cordura y no vaya a peores.
Lo que me sorprende de todo esto es que pronto se aplica la ley para estos temas y que lenta es la ley para otras cosas más trascendentales.
Quisiera pensar que no esta politizado ya que tendrá que haber pruebas contundentes para haber tomado ésta decisión tan violenta porque detener, fichar y enviar a una persona a prisión es un poco vilolento a mi parecer.