Los vecinos lamentan la falta de previsión del Ayuntamiento de Bétera ante las fuertes lluvias

Bétera ha sido una de las localidades de la provincia de Valencia más castigadas por las lluvias del pasado viernes, de hecho en tan sólo una hora de lluvias, desde las 22.oo hasta las 23.00 horas de la noche, se recogieron hasta 126 litros por metro cuadrado.
Durante la noche del viernes muchos vecinos vieron como las alcantarillas de la localidad no daban a basto y poco a poco las calles, parques y plazas de Bétera fueron inundándose de agua. Según el testimonio de algunos vecinos el viernes quedó patente que los sistemas de drenaje de agua no funcionaron y que la localidad no está preparada para soportar este tipo de trombas de agua tan frecuentes en nuestro territorio.
Buena prueba del caos que durante algunas horas vivió la localidad son estas fotos que nos han mandado algunos lectores. Reme López, una vecina de Bétera, cuenta que temieron por sus casas ya que hay zonas donde el agua se acumula y baja a gran velocidad y ya han sufrido otras veces los efectos de las riadas.

En algunas calles y avenidas de Bétera el agua bajaba con tanta fuerza que algunos conductores optaron por dejar los coches y salir de la zona a pie por miedo a ser arrastrados. Los vecinos tuvieron que llamar a la Policía Local para que se llevasen los coches aparcados. Pilar Sancho, la autora de estas fotografías, asegura que afortunadamente la intensa lluvia no duró mucho rato “ya que de haber llovido un poco más ahora estaría quitando el barro de mi casa”. 

Aunque sin duda la zona más castigada fue la Alameda de Bétera. Allí los vecinos aseguran que esta zona se convirtió en un verdadero río y que el Ayuntamiento de Bétera, a pesar de la preemergencia decretada por lluvias intensas, no se preocupó por advertir, informar o retirar los coches aparcados en la Alameda.
Por su parte otra vecina, Pilar Sancho, lamenta la falta de previsión: “El Ayuntamiento de Bétera podría haber señalizado la zona como cuando se avisa de la retirada de los coches por el paso de una procesión. En la Alameda se vivieron momentos de pánico ya que muchos coches se quedaron parados y los conductores se ayudaron unos a otros para salir. La próxima vez el Ayuntamiento de Bétera debería de preocuparse de que la zona quedase totalmente despejada ya que se ponen vidas humanas en juego”.