Foto: Ayuntamiento de Cullera
EP. La Policía Local de Cullera ha salvado de morir asxifiada a una perrita que fue abandonada durante horas en plena ola de calor en el interior de un maletero de un coche, y atrapada bajo una bicicleta sin ventilación y soportando temperaturas de más de 45 grados. El dueño ha sido imputado por un delito de maltrato animal, según han informado fuentes municipales en un comunicado.
La perra fue descubierta por una empleada del servicio de la ORA que al acercarse vehículo para multarle por no tener el tique de aparcamiento, escuchó unos extraños ruidos en el interior del maletero, por lo que avisó a la policía ante la de que pudiera ser un animal.
Los agentes, ante la imposibilidad de localizar al propietario del turismo, tuvieron que valerse de unos ganchos para poder abrir el coche gracias a una rendija de apenas un centímetro que había quedado en un ventanal no bajado del todo.
Tras lograr acceder al interior del coche, se pudo desbloquear la puerta del maletero y en su interior encontraron una perrita de raza mixta y unos cuatro años atrapada debajo de una bicicleta.
La mascota estaba al borde de la muerte, completamente deshidratada por las temperaturas de más de 45 grados que había tenido que soportar, sin agua ni ventilación. La policía sospecha que pudo estar atrapado durante largas horas en una jornada en que Cullera registró un fuerte bochorno. El can había vomitado y defecado en el interior del maletero.
Con la ayuda del vecindario, la Policía Local le procuró agua y le trasladó rápidamente a una clínica veterinaria para su reanimación. Afortunadamente, el personal sanitario logró estabilizarla y la entregó a la protectora local Esperança Animal para su custodia. En el centro se pudo comprobar que la perra, que ha sido rebautizada como Barbita, no disponía de chip.
Diligencias contra el propietario del coche
La Policía Local de Cullera ha abierto diligencias y ha localizado ya al propietario del coche, un vecino de Madrid que responde a las iniciales de E.T.P. y que cuenta con antecedentes penales. Los agentes, que grabaron el rescate como prueba judicial, han puesto el caso en manos de la Justicia y han abierto la vía administrativa y penal, imputándole al propietario un delito por maltrato animal.
El oficial al mando del servicio ha explicado que si llegan “15 minutos más tarde, el animal se hubiera muerto”. Al respecto, la concejal de Policía, María José Terrades, ha querido agradecer a los agentes “su excelente actuación” en un caso “trágico que ha tenido un final feliz”.
Asimismo, la concejala ha hecho un llamamiento a la ciudadanía para que “se respeten los derechos de los animales” y ha señalado que la Administración local “hará todo lo que esté en su mano por que se cumpla la ley también en esta materia y además promoverá campañas de concienciación”.