Hola de nuevo: he vuelto.

Durante muchas semanas he estado totalmente desaparecida tanto de aquí, como de muchos ámbitos que me rodeaban. Hoy, por primera vez, depuse de un corto pero intenso periodo de tiempo; vuelvo a posarme delante de mi ordenador para abrir el Word en blanco, vuelvo a coger el teclado y ajustar el tamaña de la letra y de los márgenes que poco a poco van a ir cogiendo más forma; hoy por fin puedo teclear a mi manera y no siguiendo las pautas de la materia que me toque estudiar en ese momento.

A lo largo de estas semanas en las que no he estado, en mis pequeños ratos libres me he ido planteando de diferentes temas de los que podía hablar y compartir mi opinión con todos vosotros, como lo he hecho siempre. Pero me he dado cuenta de que ya es 13 de diciembre, del último mes de nuestro año: este año en el que todos y cada uno de nosotros hemos tenido que decir adiós a muchas personas, a muchas cosas. Hemos tenido la valentía de afrontar día tras día nuestra nueva normalidad y pensar que ya está a punto de terminar este año me hace pensar en muchas cosas.

Cuesta de creer como se ha podido producir un avance temporal tan grande y notable al mismo tiempo. ¿De qué mejor manera que reflexionar sobre lo que ha supuesto este año para nosotros?

Definir tanto nuestro año, como todos los momentos, definirnos a nosotros como componentes del…Resumir todos estos aspectos en una palabra. Yo creo que la palabra que utilizaría para definir esta nueva etapa que hemos vivido sería realidad.

Esta etapa a la que en 16 días le ponemos el broche final para poderla guardar en la carpeta de nuestra vida como una más la definiría así; esto ha sido un golpe de realidad para todos. A partir de este año nos hemos dado cuenta de lo que realmente estamos haciendo en este mundo, y si no sabéis la respuesta aún no pasa nada porque yo os la puedo decir. Lo que estamos haciendo es levantarlo: cada uno de nosotros día tras día nos levantamos para ir al trabajo, estudiar o poder llevar a una familia. Esos trabajos los cuales hacen que tanto económicamente, como socialmente y dentro del área de la salud, continúe el planeta en marcha. Esos estudiantes que ahora mismo se encuentran en la recta final de la primera parte de su curso; ellos van a ser el futuro, quienes les tomarán el relevo para poderlo llevar a cabo de la misma manera o incluso mejor que las personas que ahora están en esa misma posición.

 

 

Todos y cada uno de nosotros tenemos una función y a lo largo de este año, hemos demostrado para lo que realmente sirve.

Pero no todo ha sido tan malo, porque hemos vuelto y más fuertes que nunca. Para poder dar la bienvenido de la forma de la que se merece a nuestro tan deseado 2021, en el cual tenemos esperanzas de que supere al 2020 de una mejor manera y con creces.

Valorar lo que realmente tenemos es un factor que ha perjudica tanto en esta vuelta, que me atrevería a decir que nos ha hecho transformarnos en personas que realmente son imprescindibles.

 

Por lo que ahora es el momento de empezar esa despedida del 2020 dentro de nosotros y preguntar:

 

¿Querido 2020, que has hecho por mí?

 

Vega Archer Rios