La Policía Local de Bétera no solo vela por nuestra seguridad patrullando las calles, sino que su trabajo va mucho más allá en varios aspectos. Una de las vertientes donde también realiza parte de su tarea está en la educación. En algunas ocasiones, los agentes se desplazan hacia las aulas para habla e informar de aspectos importantes de nuestra vida *diaria. Así, suelen tratar temas como la seguridad vial, la drogadicción o el bullying. En este sentido, estos días han estado con los alumnos de primero de la ESO de la IES Las Albahacas de Bétera hablante sobre bullying.
Se considera bullying o acoso escolar el maltrato físico y/o psicológico deliberado y continuado que recibe un niño por parte de otro u otros, que se comportan con él cruelmente con el objetivo de someterlo y asustarlo, en orden a obtener algún resultado favorable para los acosadores o simplemente a satisfacer la necesidad de agredir y destruir que estos suelen presentar. El bullying implica una repetición continuada de las burlas o las agresiones y puede provocar la exclusión social de la víctima.
Precisamente, hace unos días se publicó a los medios de comunicación que un estudio realizado en el King’s College de Londres, en el Reino Unido, ha descubierto que una exposición continua al acoso durante la adolescencia puede provocar cambios físicos en el cerebro y aumentar la probabilidad de sufrir una dolencia mental. Los investigadores del Reino Unido mesuraron áreas del cerebro de adolescentes cuando tenían 14 y 19 años. De estos últimos, aquellos que habían sufrido acoso escolar crónico presentaron una disminución de las áreas cerebrales del núcleo caudado, que los investigadores asociaron a unos mayores índices de ansiedad.