La semana pasada el equipo de Betera.com fue informado, por parte de fuentes vecinales de la localidad de Llíria, de un posible suicidio en el citado municipio de la comarca del Camp de Túria. Sin embargo, sin poder contrarrestar la información en ninguna fuente oficial o agencia, preferiremos no publicar nada sin que esta noticia saliera publicada en ninguno otro medio, puesto que se trataba de un tema muy delicado.
Este fin de semana pasado, la noticia de este suicidio se publicaba en varios medios, siendo similar la información que se daba a la que nosotros teníamos.
Al parecer, una joven transexual de 18 años, saltaba de un balcón el pasado martes en Llíria, después de sufrir diversas vejaciones. Ahora, la Guardia Civil y el Juzgado de Instrucción número 3 de Llíria investigan si el acoso y las burlas han sido lo detonante porque la joven se quitara la vida. Los agentes del equipo de Policía Judicial de la capital del Camp de Túria ya han iniciado los trámites para citar como testigos a amigos, compañeros de estudios y familiares, para ver hasta qué punto la presión por su condición sexual pudo ejercer de detonante del suicidio.
La Guardia Civil también rastreará los comentarios en las redes sociales de la joven, Facebook e Instagram, donde recibió insultos y mofas en relación con su transexualidad. Si los agentes consiguen demostrar la relación entre el acoso y la muerte, el caso podría acabar siendo instruido como un delito de odio.
La joven parece que llevaba tiempo en tratamiento y ya había hecho los primeros pasos para afrontar el cambio de sexo, después de cumplir los 18 años. Esta se quitó la vida después de quedarse suela en casa de una amiga con la cual estaba pasando la tarde.