(EFE) El precio de la vivienda usada en España bajó un 1,3 % en mayo, el segundo mes completo de estado de alarma. Esta cifra modera el incremento interanual al 1 % y sitúa en 1.730 euros el metro cuadrado, según un informe de idealista.com, que indica para la Comunitat Valenciana un aumento del precio del 0,4 % en ese mes.
Todas las comunidades autónomas han registrado descensos, excepto Andalucía, donde los precios se mantuvieron estables, y Baleares, donde subieron un 0,5 %, Comunitat Valenciana (0,4 %) y Extremadura (0,2 %), con Soria como ciudad donde se encarecieron las viviendas de segunda mano (5,5 %), en un contexto de aumento de la oferta proveniente sobre todo de divorcios o separaciones y herencias.
El mayor descenso de precios se produjo en Navarra (-2,1 %), Cataluña (-1,9 %), Aragón y Canarias (-1,5 % en ambos casos), seguidas de Cantabria (-1,2 %), Castilla-La Mancha (-1 %), Galicia y La Rioja (-0,8 % en ambos casos), Madrid (-0,7 %), Castilla y León (-0,6 %), Asturias y Euskadi (-0,4 % en ambas regiones) y Murcia (-0,2 %).
Los precios se mantuvieron estables durante el mes de mayo en Andalucía y crecieron en Baleares (0,5 %), Comunitat Valenciana (0,4 %) y Extremadura (0,2 %).
Baleares, la comunidad más cara con un precio medio de 3.105 euros el metro cuadrado, marcó en mayo su precio más alto de la serie histórica, seguida de la Comunidad de Madrid (2.783 euros el metro cuadrado) y Euskadi (2.597 euros).
En el lado opuesto de la tabla se sitúan Castilla-La Mancha (861 euros el metro cuadrado), Extremadura (905 euros) y Murcia (1.054 euros), como las regiones más económicas para comprar una casa de segunda mano.
Por provincias, los precios bajaron en 40 de las 52, con Granada liderando el ranking (-4 %), seguida de Navarra (-2,1 %), Zaragoza (-1,9 %), Santa Cruz de Tenerife (-1,8 %) y Guadalajara (-1,5 %).
En el lado contrario, las mayores subidas se produjeron en Soria, donde los propietarios piden un 2,7 % más por sus viviendas, Alicante (1,3 %), Málaga (0,9 %), Ávila (0,7 %) y Baleares (0,5 %).
Las provincias más caras son Baleares, con 3.105 euros el metro cuadrado, Guipúzcoa (2.978 euros) y Madrid (2.783 euros), mientras que la más económica es Cuenca, con un precio de 762 euros por cada metro cuadrado, seguida de Toledo (767 euros) y Ciudad Real (793 euros).
Según este informe, Soria es la capital que ha experimentado una subida más pronunciada de precios (5,5 %), seguida de Cuenca (4,6 %), Ávila (2,9 %), Valencia (2,7 %), San Sebastián (2,6 %) y Cáceres (2,5 %).
Las Palmas de Gran Canaria es, en cambio, el mercado donde más han bajado los precios (-2,4 %), seguida por Lleida (-1,6 %), Castellón de la Plana y Teruel (-1,4 % en ambas capitales).
En la ciudad de Barcelona el precio ha crecido un 1,3 %, hasta los 4.209 euros el metro cuadrado, mientras que en Madrid lo ha hecho un 0,5 % (3.782 euros) y San Sebastián sigue siendo la ciudad más cara, con un precio de 4.741 euros el metro cuadrado, el más alto de la serie histórica.
Según el jefe de estudios de idealista, Fernando Encinar, durante el confinamiento el stock de viviendas usadas creció de forma exponencial, con casas provenientes sobre todo de divorcios o separaciones, de herencias y de propietarios que han tenido una urgente necesidad de liquidez.
Un aumento de la oferta que, a su juicio, continuará en los próximos meses, mientras que la demanda arrastrará dificultades para comprar, motivadas por la falta de empleo y de ahorros para asumir una hipoteca.
Según Encinar, los datos de mayo adelantan un proceso a corto plazo de bajada de precios de hasta dos dígitos en algunas zonas donde el aumento de la oferta sea significativo y la reducción de la demanda, relevante, con una rápida recuperación que devolverá los precios en 2021 a los niveles anteriores a la crisis de la COVID-19.EFECOM.