Betera.com ha recibido un nuevo comunicado de la Plataforma Libre Elección Educativa de la Comunitat Valenciana. En él, se pide que la asistencia al centro educativo sea opcional con alternativa a distancia:
“Hace poco más de un mes no existíamos. Hoy somos cientos de familias que, unidas por las redes sociales, y más allá de ellas, queremos salvaguardar la salud de nuestros hijos. La pandemia por COVID19 ha modificado, en muchos aspectos, nuestra percepción de lo que es y significa un entorno seguro. Un virus que ataca, por igual, a todos los segmentos de la sociedad.
Decidimos crear la Plataforma para establecer vínculos entre las familias, que nos permitieran avanzar unidos ante cualquier tipo de contingencia, a esa Plataforma le dimos el nombre de “Libre Elección Educativa Comunidad Valenciana” con el hashtag #VueltaSegura. Nos dimos un Manifiesto para ese principio de libre elección educativa, porque somos madres y padres y para nosotros el bien más preciado son nuestros hijos.
En ese Manifiesto, afirmamos la “firme decisión de exigir a las autoridades educativas que las familias puedan elegir libremente sobre la modalidad de enseñanza on line o presencial para nuestros hijos”. No renunciamos a ninguno de los derechos que como alumnos a nuestros hijos les asisten en su centro de referencia, porque entendemos que ambas modalidades de enseñanza implican una necesaria escolarización.
No somos familias insumisas, como desde algunos medios se ha intentado hacer ver. Somos familias preocupadas y concienciadas. Pensamos que mientras no desaparezca la pandemia por COVID-19, o sus efectos, por terapia segura o vacuna efectiva, se debe dar la oportunidad a las familias de poder elegir.
Todo esto parece tan obvio que es de sentido común decir lo contrario. Una situación de grave pandemia, con miles de víctimas en todo el país, y las autoridades educativas siguen empeñándose en la modalidad presencial con carácter exclusivo.
Al poder elegir libremente la modalidad de enseñanza, los alumnos que estudiaran en la modalidad on line harían que bajara las ratios en clase, y el entorno para los alumnos cuyas familias optaran por la vía presencial sería más adecuado y saludable. Al haber menos alumnos en el aula se mitigaría (en lo posible) la infección, porque recordemos que las aulas NO son un entorno seguro, experiencias de otros países lo demuestran, y en estos momentos la transmisión comunitaria del virus es real, con tasas superiores a 100 casos por cada 100.000 habitantes, una auténtica barbaridad. Y aún más cuando expertos internaciones dicen que los centros educativos son fuente de contagio, al existir vía de transmisión por aerosoles.
En julio de este mismo año, un grupo de 239 científicos de 32 países enviaron una carta a la Organización Mundial de la Salud (OMS) para pedirle que reconsiderara la posibilidad de que el coronavirus se transmita a través de micropartículas en suspensión o aerosoles. Los expertos alegaban, en el artículo, publicado en la revista científica Clinical Infectious Diseases, que existe evidencia suficiente para considerar que el SARS-CoV-2 sí podría propagarse en espacios interiores cerrados a distancia través del aire y, por tanto, resultar potencialmente infeccioso. Por ello, pedían a la Organización Mundial de la Salud (OMS) que revisara sus recomendaciones. Las aulas al ser un recinto cerrado y, en muchos casos, con poca o nula ventilación serían un foco importante de transmisión entre los alumnos.
Entendemos que el Gobierno Valenciano ha demostrado una falta total de sensibilidad hacia las familias, que están sufriendo la incertidumbre de mandar o no a sus hijos al colegio, con el temor a una infección y con la amenaza (como ya se ha visto en diversos medios de comunicación) de sanciones o incluso de penas de prisión para los llamados “padres insumisos”; equiparando el absentismo común a una grave pandemia que pone en peligro nuestra integridad y la de nuestras familias.
El Código Civil habla de la patria potestad, como responsabilidad parental, que se ejercerá siempre en interés de los hijos, de acuerdo con su personalidad, y con respeto a sus derechos, su integridad física y mental. Y añade que en esa función se comprende “velar por ellos, tenerlos en su compañía, alimentarlos, educarlos y procurarles una formación integral”. Por ello, nadie puede amedrentar a nuestras familias, ya que reivindicamos algo justo, que es la protección de la salud de nuestros hijos.
De ahí la recogida de firmas por vía telemática y de redes sociales, de apoyo a los principios rectores del Manifiesto, y su posterior entrega en la Conselleria de Educación, Cultura y Deporte a la atención del Hble Sr. Conseller.
El día 1 de septiembre de 2020 es solo el principio, debemos estar unidos para conseguir nuestros objetivos. No podemos decaer. Nos jugamos mucho, porque recordemos que nadie puede garantizar un aula cien por cien libre de contagios.
Porque es nuestro derecho.
Porque son nuestros hijos”.