Desde el año 2007 la Organización Mundial de la Salud celebra el Día Internacional de la Audición, cada 3 de marzo, para impulsar la detección temprana de cualquier tipo de problema o deterioro auditivo que se pueda presentar en las personas de todo el mundo.
En la mayoría de los casos, los pacientes con problemas en la audición no notan los cambios hasta que ya es demasiado tarde y el problema está muy avanzado. Por eso, se busca incentivar en la población mundial a que realicen dentro de su chequeo anual un estudio de los niveles auditivos.
Como los problemas auditivos se pueden detectar desde sus inicios, la Organización Mundial de la Salud lanzó una aplicación para realizar un examen auditivo a todas aquellas personas que la tengan instalada en sus dispositivos móviles. Aunque la aplicación no busca sustituir al médico, permite hacer una detección temprana de algún problema a nivel auditivo.
Para descargar la aplicación solo debes hacer clic en HearWHO y descargarla en el dispositivo que prefieras. El objetivo que se persigue con este tipo de iniciativas tecnológicas es:
- Concienciar a todas las personas sobre la importancia y cuidado del aparato auditivo.
- Motivarlas a que se realicen un chequeo recurrente de su audición y adopten prácticas sanas para el cuidado de su sistema auditivo.
- Servir de herramienta a los trabajadores sanitarios para que puedan chequear de forma fácil y rápida la audición de los miembros de su comunidad.
La finalidad principal del Día Internacional de la Audición es la difusión de información tanto de prevención como de tratamiento para aquellos que sufren de alguna discapacidad auditiva. Aunque el desarrollo tecnológico en aparatos auditivos continúa, creando herramientas cada vez más sofisticadas, la mejor estrategia en contra de las enfermedades del oído es la prevención.
Es por eso que cada año cambia la temática, para crear conciencia de las diferentes afectaciones que existen y cómo podemos prevenirlas para que el ascenso de los casos de pérdida auditiva de todos los tipos pueda frenarse.
En 2023, el lema del Día Internacional de la Audición es el siguiente: “¡Cuidado del oído y la audición para todos! Hagámoslo realidad“.
Con este tema se trata de incluir el cuidado del oído y la audición en la atención primaria, como un componente de la cobertura sanitaria básica y universal en todos los lugares del mundo.
Especialistas recomiendan limitar el volumen y el tiempo de uso de los auriculares para preservar la salud auditiva
La Conselleria de Sanidad Universal y Salud Pública harecordado que especialistas en Otorrinolaringología, con motivo del Día Mundial de la Audición que se conmemora cada 3 de marzo, recomiendan limitar el volumen y el tiempo de uso de los auriculares, sobre todo los de botón, para preservar la salud auditiva.
El uso de estos dispositivos ha experimentado un incremento exponencial en determinadas franjas de edad no sólo en el entorno laboral (para el teletrabajo), lúdico (juegos o reuniones en línea) o docente (teleformación) a raíz de la pandemia por coronavirus y, ha advertido Sara Ferrero, otorrinolaringóloga en el Hospital General Universitario de Elda y miembro de la Junta Directiva de la Sociedad Valenciana de Otorrinolaringología, no siempre se emplean de forma adecuada.
En este sentido, especialistas en ORL insisten en que un mal uso de los auriculares puede derivar en una pérdida de audición o en la aparición de acúfenos, ruidos constantes percibidos sólo por la persona afectada.
Para concienciar a estos colectivos, Sara Ferrero ha recordado que “el volumen de los dispositivos de audio personales, como los auriculares, puede llegar a 136 dB y los sonidos perjudiciales suelen ser aquellos que se sitúan por encima de los 85”.
Por ello, esta especialista aconseja limitar el tiempo que dedicamos a actividades ruidosas, hacer descansos auditivos, reducir el uso de auriculares a alrededor de una hora diaria y no superar el 60 % del volumen máximo del dispositivo.
Además, recomienda que el dispositivo tenga el mayor grado de aislamiento externo posible y, si es factible, que incorpore sistemas de reducción del ruido ambiente para minimizar el volumen al que se usa.
Sonidos constantes o dificultades para entender las conversaciones
El número de nuevos diagnósticos por problemas de audición ha pasado de 26.700 en 2018 a 40.400 en 2022 en la Comunitat Valenciana. Este aumento del 51% en la incidencia se correlaciona con un incremento de casi un 14 % en el último lustro en la cifra de consultas atendidas en la red pública valenciana, de acuerdo con los datos que maneja el Sistema de Análisis de Sistemas de Información Sanitaria de la Conselleria de Sanidad Universal y Salud Pública.
En concreto, los diferentes niveles asistenciales atendieron más de 89.200 consultas relacionadas con problemas de audición en la Comunitat Valenciana el año pasado, la cifra más alta de los últimos cinco años, frente a las 78.400 de 2018.
El aumento se puede asociar a diferentes factores. De un lado, la mayor conciencia social sobre la importancia de cuidar la salud auditiva; de otro, el aumento en la esperanza de vida y el envejecimiento poblacional. De hecho, el grueso de las consultas, en términos absolutos, se concentra en la franja de 70 a 79 años desde 2018. Además, esta tendencia al alza coincide en el tiempo con la pandemia por coronavirus.
En este punto, Sara Ferrero, otorrinolaringóloga en el Hospital General Universitario de Elda y miembro de la junta directiva de la Sociedad Valenciana de Otorrinolaringología, ha apuntado la necesidad de estudiar en profundidad si existe una relación causal entre los fenómenos microtrombóticos descritos en infecciones de COVID-19, no necesariamente severas, y las hipoacusias unilaterales que se están diagnosticando ahora, tras los años más duros de la pandemia.
“Muchos pacientes que estamos viendo en consulta describen que pasaron la COVID sin demasiadas complicaciones, en casa, y que justo después han perdido audición en uno de los oídos”, ha comentado. “La posible relación entre coronavirus y pérdida auditiva, sin embargo, iría más allá”.
A raíz de la pandemia, ha añadido Ferrero, la utilización de auriculares se ha incrementado y “se deben emplear convenientemente para prevenir lesiones”.
En cualquier caso, si la persona experimenta sonidos constantes (los acúfenos), pérdida de audición o dificultad para entender conversaciones, lo recomendable es consultar con un especialista para detectar las lesiones de forma precoz y adoptar las medidas oportunas.
En el caso de los menores, el diagnóstico temprano es crucial para que la pérdida auditiva no perjudique al aprendizaje; en las personas más mayores, en prevención del aislamiento social.