Cuando llega el 15 de agosto, la emoción y la alegría de los vecinos y vecinas de Bétera está a flor de piel. Después de dos años sin poder celebrarlo, centenares y centenares de personas, tanto de nuestro pueblo como otros lugares, han salido a las calles del municipio a recibir las majestuosas Albahacas de grandes dimensiones y a las Obreras y Mayorales de este año. Este año, la albahaca más grande ha medido 3’17, aproximadamente.
El día empezaba alrededor de las 07.30 horas en punto a la puerta del Ayuntamiento de Bétera donde los Mayorales de 2023 se han reunido con la corporación municipal para ir a recoger a las obreras solteras de 2022, alrededor de las 08.00 horas.
Apenas pasadas las 10 de la mañana, mayorales y obreras llegaban al Huerto de las Albahacas donde les esperaba una nube de cámaras que querían captar cada uno de los momentos especiales que se vive en el huerto minutos antes de que empiece la fiesta. Fotos, fotos y más fotos. Todo el mundo quería inmortalizar el momento.
Después de las fotos oficiales llegaba el momento que los “cosieters” de cada una de las obreras solteras entraron al corral. Ellos y ellas han sido las que durante toda la rodà y a pesar del calor, el cansancio y la gente han llevado con toda su alegría las albahacas hasta la Iglesia de la Purísima. Durante más de 4 horas han tenido tiempos para dar a las espectaculares plantas tantas “voltetes” como los vecinos y vecinas los han pedido.
Aina y Paula han salido del huerto acompañadas por sus Obreras Casadas, Mariola y Cristina. Las dos Obreras Solteras estaban espectaculares vestidas de Obreras y han aguantado todo el recorrido con una bonita cara de felicidad, siempre escoltadas por sus respectivos sombrilleros, sus familiares y los miembros de la corporación municipal que no han dejado de abanicarlas para aliviar el fuerte calor que hacía esta mañana en Bétera.
Como cada año, la gente se ha volcado con la fiesta, los vecinos han salido a la calle con sus camisas de flores para disfrutar del día grande que continúa esta noche con la esperada cordà y coetà por todas las calles del casco urbano.
Cómo manda la tradición, la gente ha bebido, ha reído, ha almorzado, se ha reencontrado con sus amigos y ha disfrutado con los miles de kilos de confeti que han tirado los Mayorales sin descanso. Después de un saco, otro. Sin cesar. Las furgonetas de “la gloma” no han dejado en toda la mañana de repartir sacos y sacos de confeti de todos los colores.
Muy pasadas las dos de la tarde, a las puertas de la Iglesia de la Purísima, se vivía uno de los momentos más especiales de todas las fiestas. Mariola recibía emocionada a su obrera soltera, Aina. Allí se han fundido en un gran abrazo que ya nunca olvidarán. Después llegaba Paula, también feliz, que ha sido recibida por Cristina. Las obreras casadas han colocado a sus obreras solteras las mantellinas para entrar a la iglesia. La emoción ha sido palpable.
Por su parte, la Colla de Campaners de Bétera también ha hecho su trabajo con los toques pertinentes de este día. La música de tabal y dolçaina de la Colla Xe que burrà, La Unión Musical de Serra y la banda del Centro Artístico Musical de Bétera han acompañado durante toda la “Rodà”.
A continuación, compartimos unas imágenes de hoy realizadas por nuestra redactora. Las fotos de las campanas, han sido cedidas por la Colla de Campaners de Bétera. Pronto ofreceremos también un vídeo realizado por nuestro cámara profesional para ocasiones importantes y especiales.
